UN MANJAR EXQUISITO Y UN ALIMENTO EXCELENTE

El pulpo, un animal marino carente de huesos, conocido como el camaleón del océano debido a su propiedad de poder cambiar de forma y de color,  ha sido considerado siempre criatura misteriosa y legendaria, cuya clase especial de anatomía unida, a veces, a un gran tamaño, solía aterrorizar a los navegantes cuando lo veían surgir de las profundidades, hasta el punto de que muchos acabaron contando historias acerca de ejemplares gigantescos que eran capaces de llevarse al fondo del mar barcos enteros cargados de mercancías y pasajeros sujetándolos por tentáculos de muchos metros de longitud. Pero este prodigioso cefalópodo también ha demostrado ser no solamente una bestia aterradora sino una fuente de alimentación muy sana al estar compuesto por una clase de proteína magra. Las ventajas de sus nutrientes son su escaso contenido de calorías y de apenas carbohidratos y grasa, estando el contrapeso en su abundancia de aminoácidos y de micronutrientes decisivos como las vitaminas, los minerales y los oligoelementos, una característica que también distingue al pulpo de otros animales porque los porcentajes de esos alimentos contenidos en su carne resultan extraordinarios. Baste decir que una cantidad tan pequeña como son 100 gramos de pulpo cocido (hervido o al vapor) tienen aproximadamente:

• 165 calorías
• 4,5 gramos de carbohidratos
• ¡29 gramos de proteína!
• 2,5 gramos de grasa
• 0 gramos de fibra
• ¡Casi el doble de las Necesidades Diarias de Vitamina B12 y Selenio!
• La práctica dosis de la necesidad diaria de Cobre
• Cantidades muy sustanciosas de Hierro, Zinc y Vitamina B6
• Porcentajes notables de Niacina, Fósforo y Sodio

No olvidemos tampoco que el método de preparación del pulpo y los alimentos que le añadamos al condimentarlo -legumbres, verduras, otras proteínas, sal- pueden alterar la textura y el sabor de esta comida tan apetitosa y nutritiva así como el valor final que le distingue como uno de los nutrientes más sanos y efectivos del reino animal. Hay que evitar, sobre todo, las frituras de pulpo en que este queda expuesto durante largo rato a temperaturas muy elevadas o se prepara utilizando aceites de mala calidad o transaturados por haber sido usados antes. 

También debéis tener en cuenta que el pulpo seco puede llegar a contener hasta tres veces más sal que la misma cantidad de pulpo fresco cocido. No olvidéis nunca que el pulpo en lata suele venir acompañado de aceite, lo que incrementa la cantidad de calorías. Procurad elegir siempre pulpo cocido, hervido o a la plancha en vez de frito. 

El muy elevado porcentaje de selenio y de vitamina B12 -micronutrientes fundamentales para la salud general, la vitalidad, el buen funcionamiento sexual y el desarrollo de los músculos- convierten al pulpo en alimento indispensable para la formación de glóbulos rojos, lucha contra los radicales libres y síntesis del ADN. La clase de nutrientes en que abunda el pulpo puede resultar una manera natural muy adecuada para combatir la inflamación y proteger contra las enfermedades y dolencias del sistema cardíaco. No olvidéis consumir habitualmente este alimento. Pocos son los que le pueden igualar en cuanto a propiedades saludables. 

Ya sabéis que el pulpo es una opción excelente para conseguir proteína de máxima calidad y toda clase de micronutrientes. Sin embargo, las personas con determinados problemas médicos deben tener en cuenta que 100 gramos de pulpo contienen algo más de la cuarta parte de las necesidades diarias de colesterol, imprescindible para construir unas células sanas, pero tomado en exceso peligroso para la salud del corazón.